La actual Ciudad de Zacatecas, vista en su conjunto es una ciudad añosa con “rostro de cantera y corazón de plata” que combina su predominante imagen de carácter colonial con fuerte acento de la arquitectura decimonónica.
La esbeltez y señorío de sus edificios denotan la posición económica y el abolengo de sus reacios habitantes quienes gracias a los beneficios de la explotación de las argentíferas minas, tuvieron concesiones y títulos especiales como el de “aristrocatas de plata”.
El muestrario arquitectónico de la Ciudad de Zacatecas contempla la obra de la gran belleza y estilos únicos, representados sin duda alguna por la majestuosa catedral considerada como el máximo exponente del barroco en toda América latina.
La esbeltez y señorío de sus edificios denotan la posición económica y el abolengo de sus reacios habitantes quienes gracias a los beneficios de la explotación de las argentíferas minas, tuvieron concesiones y títulos especiales como el de “aristrocatas de plata”.
El muestrario arquitectónico de la Ciudad de Zacatecas contempla la obra de la gran belleza y estilos únicos, representados sin duda alguna por la majestuosa catedral considerada como el máximo exponente del barroco en toda América latina.